Psiconaturaleza
El ilustre José María Esquerdo Zaragoza y la naturaleza como sanación mental
(1852/02/01 – 1912/01/30)
Desde tiempos remotos el llamado “loco” ha sido tratado como un ser fuera de lo natural y normal, el cual debía ser alejado de la sociedad, ocultado de los humanos, los animales y la naturaleza como método de sanación…El ilustre Don José María Esquerdo Zaragoza dio un gran vuelco a esta visión y cura de los enfermos mentales.
Don José María Esquerdo Zaragoza nació en Villajoyosa (Alicante) a principios de Febrero de 1842. Se licenció en Cirugía y Medicina, con calificación de sobresaliente, en la Universidad Central de Madrid, donde conoció al Dr. Mata, impulsor en España de la Medicina Legal, que le hizo interesarse de forma especial en la neuropsiquiatría y en los derechos de los entonces conocidos como «enajenados»(enfermos mentales). En 1866 fue nombrado profesor por oposición en el Hospital General de Madrid, lo que hoy en día es el Hospital General Universitario Gregorio Marañón.
Introdujo la neuro-psiquiatría, creó la terapia ocupacional. Esquerdo fue uno de los precursores en el reconocimiento del estudio de las enfermedades mentales como una especialización de la medicina y, al tiempo, de las necesidades y particularidades de los enfermos, pidiendo la reforma del Código Penal y defendiendo en el Senado la irresponsabilidad de la persona afectada por problemas mentales. Realizó estudios sobre cómo el tratamiento de la enfermedad mental podía variar su curso y sobre la importancia del entorno en el que vive este tipo de enfermos.
En 1877 fundó un famoso sanatorio mental, el Sanatorio Esquerdo, ubicado en Carabanchel. Fue famoso por su teatro en que los internos y los cuidadores representaban obras dramáticas y donde eliminó el tratamiento coercitivo extremo de los sanatorios de la época, sustituyéndolo por una asistencia a cargo de médicos y enfermeros adecuadamente instruidos. Este manicomio se rodeó de jardines y huertos, y los enfermos podían pasear y disfrutar del entorno sin dejar de ser atendidos. A parte, también investigó el «stress» ocasionado por el fuerte ritmo de la vida urbana y las grandes aglomeraciones de ciudadanos.
Estaba plenamente convencido del beneficio terapéutico de la sensación de libertad y el buen clima y, con este criterio, abrió una sucursal del manicomio de Carabanchel en la playa del Paraíso en Villajoyosa. Allí llevaba a los enfermos a pasar largas temporadas cerca del mar, lo que le permitió explorar los efectos de los contrastes geográficos y climáticos sobre sus pacientes ya que el tratamiento natural y libre experimentado en El Paraíso de Villajoyosa fue revolucionario en su momento. El aire libre, el olor a mar, la sensación de la hierba y la arena bajo sus pies, la naturaleza rodeándoles, el cantar de los pájaros, el cielo anestésico y el mar balsámico, todo esto sanaba a sus pacientes más rápida y fácilmente que los fármacos y la clausura del ser. “La vida reposada del campo se disfruta aquí en todo su desarrollo”. “…aquí solo se respira ese soplo, alegre y melancólico a un mismo tiempo y a la par sencillo y solemne, que irradian las grandezas de la Creación cuando se presentan con toda la mayor dulzura y amenidad posibles”.
José María Esquerdo Zaragoza falleció el 30 de enero de 1912, en su casa de Madrid y fue enterrado en la Sacramental de San Lorenzo y San José, de Carabanchel Bajo.
Volvemos a la actualidad y la realidad…hoy en día pagamos mucho dinero por sesiones de spa, vacaciones en lugares alejados del ruido y el estrés,…etc , lugares de descanso y desconexión para relajarse y volver a “cargar pilas” o reencontrarse con uno mismo. Yo ahora os digo que reflexionéis… ¿No será lo que buscamos ahora, lo que el doctor Esquerdo nos introdujo como medicina? ¿A caso la solución a nuestros problemas no está siempre en la naturaleza que nos rodea?
¡Vívela, siéntela, ámala!