Alimentos light

En los supermercados abundan los alimentos que se comercializan con la etiqueta de “light” en su envase: yogures, refrescos, chocolate, mantequillas y un largo etcétera. Según dicen, ayudan a adelgazar y son de mucha ayuda en un régimen dietético ¿Pero realmente sabes que son los alimentos light y que nutrientes te aportan? ¿Funcionan realmente? ¿Aportan menos calorías que un alimento “normal”? Hoy en wakan te vamos a descubrir si los productos light son ventajosos o no, si dañan o perjudican al organismo, e inclusive si realmente ayudan a bajar de peso o lo incrementan.

Los alimentos light son aquellos alimentos supuestamente reducidos en grasas, carbohidratos y calorías, esto se logra con la reducción, eliminación o sustitución de uno o varios componentes del alimento natural; ejemplo de ello son los edulcorantes o sustitutivos de grasas. Los alimentos light comenzaron a surgir alrededor de los años 80. El primer edulcorante utilizado como sustituto de la azúcar fue la sacarina, estos alimentos estaban dirigidos principalmente a las personas diabéticas o a aquellas que querían disminuir tallas y peso. Fue necesario introducirlos en el mercado porque había muchas personas que cuidaban su peso y alimentación, pero sin embargo tenían necesidad de disfrutar de ciertos placeres gastronómicos. Los primeros alimentos light fueron principalmente bebidas sin azúcar. Fue también en los 90’s cuando la industria alimentaria analizó todos los sustitutos utilizados, y se realizó algunos cambios en el proceso de elaboración de los alimentos para satisfacer las necesidades de los consumidores. Junto al crecimiento de la industria alimentaria, surgió una necesidad por parte de los consumidores, necesitaban saber que estaban comiendo; por ello las empresas se vieron obligadas a establecer el etiquetado nutricional de los alimentos.

Así pues, un alimento light es aquel comestible que en términos de nutrición se ha bajado en un 50% respecto a la versión “entera” de dicho alimento, y que a través de diversos estudios ha demostrado que un alimento de esta índole tiene 30% menos aporte energético que los alimentos normales.

Una dieta equilibrada supone una ingesta de unas 2.000 calorías diarias para los hombres y 1.800 calorías para las mujeres, de manera que, entre un 45-55% de esta energía debe provenir de los hidratos carbono, entre un 15-25% de las proteínas, y un 25-35% de grasas totales. Las grasas deben proceder en su mayoría del aceite de oliva, mientras que las saturadas (de origen animal) y trans (industriales), así como los azúcares añadidos (refrescos, dulces) deben limitarse y consumirse solo de forma ocasional.

¿Podemos consumir habitualmente estos alimentos?

Los médicos y en general los nutriólogos, no recomiendan que dichos alimentos sean parte de la dieta en personas con un estilo de vida bueno, hablamos de personas que hacen deporte, comen sanamente y a sus horas y que tienen el peso ideal. Debemos estar siempre muy conscientes de que si se abusa de estos alimentos podríamos desencadenar un desequilibrio nutricional grave.
El ejemplo más claro que tenemos, es el de las grasas, que siempre son disminuidas o eliminadas de los alimentos light, y que en nuestro cuerpo son importantísimas, porque es en las grasas donde podemos encontrar muchas de las vitaminas liposolubles esenciales para el organismo, al igual que ácidos grasos que son muy importantes. Otro problema que se observa comúnmente por el exceso en el consumo de los alimentos light es el hecho de se limitan los carbohidratos en la dieta, y esto puede traer consecuencias demasiado graves, debido a que el cuerpo utiliza a los carbohidratos como fuente de energía, y si no los tuviera disponibles el organismo muy seguramente tomaría nuestras reservas energéticas de donde estuvieran disponibles, lo que ocasionaría graves problemas alimenticios.

¿Engordan o ayudan a adelgazar?

Incluso en sus versiones «ligeras», determinados alimentos siguen siendo muy calóricos porque contienen un porcentaje elevado de grasas saturadas o trans y/o azúcares, por lo que su consumo debería seguir siendo muy ocasional.  Los productos light hacen que se incremente el consumo. Se suele pensar que no engorda y se toma más cantidad. Los estudios han demostrado que a más productos light más peso porque, en general, la gente se pasa de cantidades, señala la doctora Monereo, que invita a los consumidores a mirar las etiquetas porque «un producto que se anuncia como bajo en grasa puede contener mucho azúcar y viceversa». «Cero por ciento grasa no significa cero por ciento calorías», matiza la experta.

A continuación compartimos algunas de las características de los alimentos light:

• Deben caracterizarse por aportar menos calorías que su contraparte normal
• Debe existir un producto de referencia en el mercado para comparar
• Debe hacer y presentarse una reducción como mínimo del 30% del valor energético respecto al producto normal
• El etiquetado debe indicarnos que se trata de un alimento o producto light
• Debe hacerse constar el contenido calórico de dicho producto light y de su referente

CONCLUSIÓN
Como lo hemos mencionado, los alimentos light son buenos si son consumidos con medida y conciencia; no es bueno abusar de ellos, ni tampoco pensar que son milagrosos per se por qué no lo son. Lo mejor es realizar actividad física y mantener una dieta balanceada para desarrollar y mantener  una buena calidad de vida. Es importante saber ¿Qué? ¿Cómo? Y ¿Cuándo? consumir productos light, y siempre tener en cuenta que en exceso pueden acarrear problemas nutricionales. Lo importante es leer las etiquetas de los envases de estos productos y compararlas con la de sus homónimos no light con el fin de comprobar la cantidad de calorías que aporta cada uno de ellos.