Consejos para conducir con alergia esta primavera

Un año más, la primavera vuelva a adelantarse, sus efectos comienzan a notarse y algunas personas los sufren especialmente. Porque, ¿sabías que en España más de 8 millones de personas padecen algún tipo de alergia?

Las reacciones alérgicas al polen de las plantas, especialmente el de las gramíneas, pueden limitar notablemente las habilidades al volante. De hecho, según la DGT, el 50% de las personas alérgicas sufren alteraciones del sueño y somnolencia diurna. Al volante, estos factores pueden poner en riesgo la seguridad durante la conducción.

A este respecto, todo taller mecánico recomienda sustituir el filtro de habitáculo (antipolen) una vez al año o cada 15.000 kilómetros. Estos filtros atrapan el 99,97% de las partículas de más de 0,3 micras, reduciendo casi por completo aquellas causantes de alergias.

Por poner un ejemplo, a una velocidad de 90 km/h un estornudo puede provocar que el vehículo recorra 125 metros sin control, mientras que si ocurre a 100 km/h, esta distancia se ve ampliada hasta los 140 metros.

Pero eso no es todo. Muchos de los medicamentos que se toman para combatir los síntomas de la alergia, como los antihistamínicos, pueden provocar somnolencia y reducir la velocidad de reacción al volante. Por ello, es fundamental acudir a un médico para que sea quien nos recete la medicación más adecuada según nuestra situación.

Si en la caja de un medicamento ves el pictograma de una señal triangular de advertencia con un coche dentro, quiere decir que es necesario leer el prospecto antes de consumirlos si se va a conducir un vehículo.

Además de lo comentado, hay otra serie de prácticas que podrán ayudarte a conducir de manera más segura durante la primavera si sufres de algún tipo de alergia:

• Si tienes previsto realizar un desplazamiento de muchas horas, comienza el tratamiento unos días antes para que el organismo se acostumbre a él y minimice cualquier posible efecto secundario.
• Lleva las ventanillas cerradas para que el polen no entre.
• Limpia el interior del coche con frecuencia para que no se acumule el polvo.
• Selecciona la opción de recirculación de aire en el climatizador.
• Los momentos con una mayor concentración de polen en el ambiente son durante el amanecer y el atardecer por lo que, siempre que sea posible, evita conducir durante estas horas.