Rayos del revés

Una serie de fotografías y filmaciones capturaron un extraño fenómeno similar a los rayos pero que, a pesar de estar cargados de electricidad, se diferencian porque van de abajo hacia arriba.

Lograr verlos es rarísimo porque duran apenas un segundo, pero los investigadores estadounidenses de la Duke University capturaron las imágenes y videos y los resultados fueron publicados en el último número de la revista Nature Geoscience y recogidos por la agencia italiana Ansa. Al verlos parecen verdaderas explosiones, mucho más ramificados que un relámpago, que se alargan cada vez más saliendo hacia la capa más alta de la atmósfera, la ionósfera.

«Pese a las difíciles condiciones de visibilidad para la luna llena y la niebla, se lograron capturar las imágenes del ‘jet gigante'», dijo el coordinador de la investigación, Steven Cummer, ingeniero informático de la Duke University.

Se trata de un resultado que parece único, aunque desde 2001 a la actualidad este fenómeno fue fotografiado unas cinco veces. Cummer logró capturar las imágenes de los «jet gigantes» casi por casualidad. Su equipo fotográfico y sus instrumentos en realidad estaban programados para capturar otros fenómenos meteorológicos.

La sorpresa fue más por las expectativas para que los  investigadores pudieran recoger también datos y medidas inéditas de la actividad eléctrica de estos extraños fenómenos. Medidas que podrían abrir «una nueva ventana sobre los procesos relacionados al circuito eléctrico global de la Tierra», dijo Brad Smull, director de la división de Ciencia Atmosférica de la Fundación Nacional Científica, que financió la investigación.

«En práctica son rayos que parten de las nubes temporales y que tienen una carga, como sus ‘primos’ que van de las nubes a la Tierra, los relámpagos», explicó Cummer. Los primeros datos muestran que la cantidad de electricidad descargada por los tradicionales rayos y aquellas de los ‘jet gigantes’ es comparable. Todavía estos últimos son más rápidos porque el aire más enrarecido en el cual se forman opone una resistencia menor.

El próximo paso será lograr tener las primeras imágenes en color de los «jet gigantes» para recolectar más informaciones sobre sus procesos químicos y las temperaturas relacionadas a ellos, mientras queda comprender cuales tipos de tempestades dan vida a estos fenómenos, añadió el informe.